ESTAD
ALERTA
33 Estad alerta,
velad; porque no sabéis cuándo es el tiempo señalado.
34 Es como un
hombre que se fue de viaje, y al salir de su casa dejó a sus siervos
encargados, asignándole a cada uno su tarea, y ordenó al portero que estuviera
alerta.
35 Por tanto,
velad, porque no sabéis cuándo viene el señor de la casa, si al atardecer, o a
la medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; 36 no sea que venga de
repente y os halle dormidos.
37 Y lo que a
vosotros digo, a todos lo digo: ¡Velad!
MARCOS
13:32-37
COMENTARIO
Nuestro Señor
JESÚS, después de hablar sobre la destrucción de Jerusalén, que tuvo lugar
alrededor del año 70 EC, la Gran Tribulación y la necesidad de permanecer fiel;
llama a sus oyentes a estar en guardia frente a estas profecías. Puso la
higuera como ejemplo. Podrían reconocer las estaciones al observar los cambios
en la naturaleza, y de la misma manera deberían estar atentos a los eventos
históricos que anuncian el regreso de nuestro Señor, para que sepamos que Él
está cerca y en camino.
Sin embargo, el
tiempo exacto, dijo el Señor JESÚS, no lo sabemos, y eso debería animarnos a
permanecer atentos y alertas a esas señales, esperando la aparición de nuestro
Señor en cualquier momento una vez que se den las condiciones.
Algo interesante
es notar cómo el Señor Jesús dice que nadie sabe el día y la hora exactos de su
propia venida, incluidos los ángeles y Él mismo (Mc 13,32). ¿Cómo Jesus no podria
conocer su propio regreso siendo Dios?
Esto demuestra,
al igual que en otros pasajes, que como "Hijo", Jesús está sujeto a
la autoridad suprema de su Padre, la representación eterna de Dios.
Como Elohim, Él lo
sabe todo, porque no hay Padre, ni Hijo o Espíritu Santo, sino UN SOLO DIOS,
Todopoderoso y omnisciente. PERO COMO EL "HIJO" DENTRO DE LA SANTA
TRINIDAD, la única forma en que DIOS se ha manifestado a nosotros, el Señor
Jesús no lo sabe, sino solo el Señor YHWH, en su reino supremo.
El llamado a
permanecer alerta no es solo para ser consciente de su regreso en Gloria, sino
para permanecer fiel, que es realmente el propósito de esta vigilancia.
Encontrar a
Cristo en su segunda venida con las manos vacías o viviendo en pecado solo
significaría destrucción para nosotros. Se nos dice que estemos alerta, que
seamos fieles y que estemos siempre preparados espiritualmente para
encontrarnos con el Señor, en cualquier momento, en cualquier lugar, incluso en
el momento de la muerte.
Para la mayoría
de nosotros, la Segunda Venida del Señor JESÚS, será en el momento de nuestra
muerte, y no en un futuro lejano.
Debemos estar
siempre dispuestos a rendir cuentas al Señor JESÚS de nuestras vidas.
Omar Flores.
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